Una vez más la familia de Canóvanas acosada racialmente queda desamparada por el sistema de justicia
por redacción revista étnica
El juez Joaquín Peña Ríos determinó el 18 de agosto de 2023 que Luis Espinet, quien amenazó de muerte con un arma de fuego a Chanelly Cortés, NO ES CULPABLE de este hecho.
Luis Espinet es hijo y cómplice de Carmen García, la mujer de Canóvanas que ha acosado racialmente a Luis Ramírez Walker, a Chanelly Cortés y a su familia por casi cuatro años en Haciendas de Canóvanas. En su veredicto, el juez dijo: “¿Qué pasó allí? Ni la fiscalía, la defensa y este tribunal lo saben.” Este juez no ejerció su deber ministerial de discernir e impartir justicia. Pero las personas que acudimos a presenciar el juicio sí vimos otra cosa.
En este caso, el juez decidió darle credibilidad al perito de la defensa en cuanto a un vídeo utilizado para plantear que los hechos nunca ocurrieron. El análisis de este perito fue contrarrestado por el análisis de un perito del Instituto de Ciencias Forenses, con estudios formales y credenciales probadas en el manejo de vídeos. Este puso en tela de juicio que el vídeo presentado no fue analizado adecuadamente. Además, en reiteradas ocasiones el perito de Ciencias Forenses dijo que el vídeo que le suministraron fue provisto por la defensa, por lo que desconoce si fue manipulado o no.
Lo cierto es que dónde se dieron los hechos no pudo haber sido captado por ninguna cámara de las instaladas en la casa de Carmen García. El juez expresó que no tomó su decisión a base del vídeo, donde no aparece Luis Espinet; sin embargo, en sus expresiones finales le dio un gran peso al vídeo como fundamento para su decisión. Sin duda, se le dio más peso a la palabra de un hombre dentista que a la denuncia de una mujer amenazada de muerte.
Denunciamos el veredicto del juez Joaquín Peña Ríos como uno sesgado a favor del Dr. Luis Espinet; uno que pone en peligro a Chanelly Cortés, a su familia y a la comunidad de Haciendas de Canóvanas. No se tomó en cuenta el patrón de acoso al que ha sido sometida la familia Ramírez-Cortés por sus vecinos, Carmen García y su hijo, Luis Espinet.
Luis Espinet y su familia están acostumbrados a la impunidad y, una vez más, el sistema de justicia se hizo partícipe del patrón de abuso y delincuencia racista y de violencia de género.
Nos preocupa la seguridad de Luis y Chanelly, de sus hijas y de la comunidad. Tras la decisión del juez Peña Ríos, responsabilizamos al sistema de justicia por cualquier daño que pudiera sufrir esta familia o cualquier otro miembro de la comunidad que llevan casi cuatro años dando la voz de alerta sobre la conducta criminal y racista de sus vecinos.